Somos el problema cuando se trata de COVID-19

Publicado en El Pais, 19 de Mayo 2020.

Parece que muchos países están listos para poner fin a la cuarentena y esto parecería una buena noticia, pero el problema es que la gente ya está bajando la guardia. Mencioné antes cómo debemos comportarnos una vez que la cuarentena termine; debiendo continuar el distanciamiento social, evitar grandes reuniones, etc. Hoy en una marcha al supermercado hubo varias cosas que me preocuparon y que resaltan el problema de levantar la cuarentena.

Parques. En mi provincia, los parques se declararon abiertos nuevamente, pero no las instalaciones dentro de ellos. Los parques infantiles, los bancos y las mesas de picnic todavía estaban cerrados con cintas y las reuniones en el parque todavía estaban estrictamente prohibidas. Tomé un atajo a través de un parque para llegar a una tienda de comestibles solo para descubrir que el parque estaba lleno de gente con grandes reuniones, cintas arrancadas de los bancos y mesas y gente sentada en ellos. Gran oportunidad para COVID-19 de extenderse por todas partes y sentí que habría otra extensión de la cuarentena al mirar este parque.

Líneas en las tiendas. Las tiendas están limitadas entre 10 a 30 clientes, dependiendo del tamaño de la tienda, y el resto debe esperar afuera. Algunas partes de la línea tenían marcadores que indicaban qué tan separados deberíamos estar (respetar). Pero una vez que esos marcadores terminaron, a las personas no les importaba, yendo a menos de 2 metros de otras personas.

Salidas familiares. Hablando de compras, muchos lo hacían en familia, lo cual me parece egoísta en muchos niveles. En primer lugar, está creando innecesariamente una reunión más grande al tener a toda su familia allí en lugar de tener un comprador designado. En segundo lugar, si la tienda solo puede albergar a 10 personas y usted es una familia de 5, está ocupando la mitad de la cantidad de personas permitidas. 4 personas deben esperar en la fila mientras usted hace sus compras.

Máscaras. Ya escribí que necesitamos superar las máscaras. Te protegen, pero lo más importante es que si estás enfermo y no lo sabes, la máscara evitará que la propagues a los que te rodean. En este punto, usar una máscara en público se trata más de ser un buen ciudadano y no es para uno mismo. A pesar del mensaje de los departamentos de salud de todo el mundo, muchos todavía no las usan. En la fila de la tienda de comestibles solo vi a una persona con una máscara además de mí entre otras 20.

Lo que realmente me molesta de todo esto es que su comportamiento afecta a todos y no solo a ellos mismos. Esto es diferente a que alguien beba demasiado o tenga una dieta poco saludable. Sus acciones no afectan a otra persona. Todos queremos que la cuarentena termine pero estaremos en riesgo si no comenzamos a actuar de manera responsable.