Publicado en El Pais, 11 Mayo 2019.
Muchos queremos que nuestros hijos desarrollen plenamente y si somos niños y adolescentes también queremos crecer al máximo de nuestro potencial. Aquí algunos consejos para esto.
No saltar el desayuno. Existe una (co)relación positiva entre las personas que saltan el desayuno y las personas que tienen obesidad. Un promedio de 80% de los adolescentes llegan a los colegios sin ingerir nada. Y después de más de 12 horas de ayuno (desde la noche anterior) muchos llegarán al recreo con tanta hambre que comerían cualquier cosa. Pero los colegios no tienen opciones saludables y ofertan comida chatarra.
Consumir 8-10 vasos de líquidos por día. Muchos llegan a las escuelas tomando una taza de leche o té. Pero esto no compensa con los requerimientos de líquido después de una noche de ayuno. Las bebidas que más se venden en la escuela o que los estudiantes se llevan son la Coca-Cola y juguitos. Bebidas que por sí solas ya tienen la cantidad de azúcar requerida por día. Menos del 18% de los estudiantes se llevan agua de por lo menos medio litro. Se debe tratar de consumir 1 vaso de agua (o cualquier liquido) cada 2 horas.
Cena. Se ha mostrado que cuando se come la cena por lo menos tres horas antes de dormir el índice masa corporal (IMC) es menor que de los que cenan menos de tres horas antes de ir a dormir. Es importante que sus hijos coman a tiempo tomando en cuenta que ellos se van a dormir más temprano y no tan tarde como adultos.
Sal. Solo necesitamos 2 gramos de sal por día y en muchos casos un plato de sopa con un pan ya tiene esta cantidad. Demasiada sal causa hipertensión, problemas cardiacos, accidentes cerebro-vasculares (ACV) o daño renal. Muchos adultos consumen demasiada sal y acostumbran a sus hijos a lo mismo desde jóvenes. Saca el salero de la mesa y cocina con poca sal.
Dormir 10 horas. La Asociación Nacional de Sueño recomienda 11 horas para niños y para adolescentes 10 horas de sueño continuo como ideal para fomentar el crecimiento mental y físico. Retire cualquier distracción que pueda estar siendo una barrera para conciliar el sueño.
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