Publicado en El Pais, 6 Abril 2019.
Para aquellos que les gusta las innovaciones y algunas marcas, Susana Galeano en su artículo menciona a la tan esperada llegada de la tarjeta de crédito Apple Card en alianza con la conocida firma MasterCard.
Esta tarjeta se asemeja mucho a lo que podría ser un asistente de financiero, porque nos facilita ver los cargos y gastos por el tipo preferencia, como también los gastos y devoluciones. Todo este análisis incluye gráficos que nos permiten ver la evolución de los movimientos de la tarjeta y poder alcanzar las metas financieras de ahorro y eliminar gastos innecesarios.
Otro punto a destacar de la tarjeta Apple Card es que ofrece 1% de reembolso en efectivo por utilizar la tarjeta física, 2% de reembolso en efectivo cuando usemos la tarjeta virtual y un 3% de devolución en compras directas con Apple. Todos estas devoluciones se harán a través de Apple Cash o de en la tarjeta de crédito. Sin embargo, la principal innovación de Apple Card es en materia de seguridad (su principal punta de lanza en innovación), la tarjeta está hecha de titanio, no tendrá un número de tarjeta, tampoco número de cuenta, códigos de seguridad y fechas de vencimiento. De esa manera Apple resguarda toda aquella información que se podría copiar y que ahora no esta al alcance de los estafadores. Todos esos datos necesarios al momento de la compra el sistema de Apple Card generará cuando uno desee realizar algún pago. Además cuando se realicé una compra el sistema requerirá un código de confirmación utilizando Face ID o Touch ID.
Hay algo más que se le ocurrió a Apple para persuadir al consumidor y que puede gustar mucho. Apple Card por ahora no cobrará tasas o tarifas por el uso de la tarjeta, tampoco cobrará las penalizaciones por pagos retrasados cómo normalmente estamos acostumbrados con las tarjetas de crédito ordinarias.
Lo negativo de esta tarjeta Apple Card es que sólo estará disponible en Estados Unidos por el momento. No obstante, Apple promete que pronto estarán llegando a más países y esperemos que Bolivia no sea la excepción.
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