Publicado en El Pais, 21 de Octubre 2020.
La semana pasada, Amazon celebró su famoso “Prime Day” exclusivo para miembros Prime. A medida que se acercaba el día, el marketing aumentó y también lo hizo a la emoción de todos (incluido yo mismo). Cuando finalmente llegó el día, fui a la aplicación y lo que encontré no fue más que una decepción. No había nada que quisiera y muchos de los descuentos eran mínimos. Después de buscar en diferentes lugares para cualquier tipo de buenos descuentos me rendí.
Después de superar esta tristeza, me di cuenta de que el marketing de Amazon era tan exitoso que estaba desesperado por gastar en su tienda en cosas que de otra manera no habría comprado. Incluso fui tan lejos como para intentar justificar la compra de algunas cosas pensando que sería bueno tenerlas.
Ahora debo señalar que esto no es un intento de difamación para Amazon, al contrario. Estoy realmente impresionado por lo que han hecho, incluso si todo fue para convencerme de gastar innecesariamente mi dinero, su marketing fue muy bueno. Por supuesto, no son los únicos. Todos hemos visto imágenes caóticas de compradores en los EE. UU. en Black Friday. Estamos capacitados para buscar razones para comprar, pero ¿es realmente un buen negocio si compramos algo que de otro modo no habríamos comprado?
El hecho es que, si alguien compra algo con un 20% de descuento, significa que gastó el 80% que no habría gastado. Eso no significa que no existe un buen descuento. Deberíamos preguntarnos antes de comprar algo en oferta: “¿Lo seguiría queriendo si no estuviera en oferta?” si la respuesta es no, entonces no debería comprarlo.
Por supuesto, muchos disfrutan de la experiencia de comprar en sí y eso es justo. Muchos dirían que lo compran en oferta porque no pueden pagarlo a precio regular. ¡y es verdad! Pero, no debemos decepcionarnos cuando una oferta no es del todo buena para nosotros. No tenga miedo de irse con la billetera llena y la bolsa vacía.
Be the first to comment